Bueno, veo que Abel ha desempolvado sus viejos discos y aquí nos trae una obra de singular factura. Crow (Cuervo), fue una banda de blues y rock, natural de Minneapolis, Estados Unidos, a la que no hay que confundir con su homónima australiana, que tuvo una existencia efímera, desde 1967 hasta 1972, pero que tuvo su cuarto de hora glorioso gracias a su tema más exitoso y conocido "Evil Woman (Don’t Play Your Games With Me)" que, entre otros halagos, tuvo la honra de haber sido versionada nada menos que por Black Sabbath. Crow estaba formado por buenos músicos y técnicamente correctos, excelentes instrumentistas, pero quizás sin alto vuelo creativo, aunque se tuvo picos altos y bajos en su producción. Pero en una época en que predominaban los grandes virtuosos de la guitarra y las colosales bandas de blues (pensemos nada más que en Canned Heat, Grateful Dead, Grand Funk Railroad, Jefferson Airplane, Steppenwolf, Allman Brothers, solo por mencionar algunos), quedó eclipsada por muchas de las grandes luminarias que dominaron la escena del rock norteamericano. Sus integrantes fueron el cantante Dave Wagner, Dick Wiegand, en guitarra, Larry Wiegand, bajo Kink Middlemist, teclados, y Harry Nehls, batería. Nehls fue tempranamente reemplazado por Denny Craswell. Mi hermano mayor, según recuerdo, compró este Crow by Crow en oferta, junto con otro de sus discos, Mosaic, en la sucursal de la calle Lavalle de la viejísima disquería Broadway de Buenos Aires que entonces era la Meca de todos los jóvenes roqueros. Debo decir que ambos discos todavía están en manos de mi hermano mayor que, entonces, podía escucharlos a diario. Como le dije una vez, mitad en broma, mitad en serio, perdí "mi gran discoteca" cuando mi hermano mayor se casó y se llevó todos sus discos (y mi tocadiscos porque me convenció de que no me serviría de nada si no tenía sus discos, esta lógica que ahora brilla por su falacia (podría haber comprado mis propios discos y conservar aun mi tocadiscos) entonces fue persuasiva para mi y me convenció y así perdí "mi discoteca y mi tocadiscos"). A mi favor puedo alegar que era un adolescente inexperto y que siempre amé mucho a mi hermano por lo que no me costó desprenderme de mi tocadiscos. Y es que el "gordo" es capaz de venderle heladeras a los esquimales y naranjas a los paraguayos, quien lo conoce sabe que puede convencer de la manera más extraña a cualquiera. Pero pasé buenos momentos con mi hermano mayor escuchando este disco y muchos otros. Y ahora Abel me devuelve aquel viejo disco perdido. Recién lo bajé y no lo escuché todavía. Lo que comento está basado en recuerdos de aquellas viejas escuchas. No sé si al escucharlo de nuevo se confirmarán aquellos viejos recuerdos o, por el contrario, no resistirá comparaciones con grandes bandas que escuché entonces y después, pero, lo que es seguro, que escucharlo de nuevo me traera a la mente una multitud de gratos recuerdos que ya comenzaron a despertarse apenas vi la carátula del disco. Una anécdota curiosa. Abel sabe (porque se lo dije una vez) que tengo ascendencia alemana por parte de mi viejo. Y mi hermano entonces compró los discos de Crow porque sus integrantes, en su mayoría, tenían apellidos alemanes, pensó (con la lógica extraña que siempre le acompañó) que siendo norteamericanos de origen alemán podrían hacer algo parecido a Steppenwolf (algunos de cuyos integrantes eran de origen germano) y, por eso, sin escucharlos, guiándose por esa corazonada y amor por lo alemán, los compró. Lo bueno que fue uno de los discos que más escuchábamos. Gracias Abel por devolverme uno de mis discos perdidos. Te dejo este modesto comentario y un abrazo
Bueno, veo que Abel ha desempolvado sus viejos discos y aquí nos trae una obra de singular factura. Crow (Cuervo), fue una banda de blues y rock, natural de Minneapolis, Estados Unidos, a la que no hay que confundir con su homónima australiana, que tuvo una existencia efímera, desde 1967 hasta 1972, pero que tuvo su cuarto de hora glorioso gracias a su tema más exitoso y conocido "Evil Woman (Don’t Play Your Games With Me)" que, entre otros halagos, tuvo la honra de haber sido versionada nada menos que por Black Sabbath. Crow estaba formado por buenos músicos y técnicamente correctos, excelentes instrumentistas, pero quizás sin alto vuelo creativo, aunque se tuvo picos altos y bajos en su producción. Pero en una época en que predominaban los grandes virtuosos de la guitarra y las colosales bandas de blues (pensemos nada más que en Canned Heat, Grateful Dead, Grand Funk Railroad, Jefferson Airplane, Steppenwolf, Allman Brothers, solo por mencionar algunos), quedó eclipsada por muchas de las grandes luminarias que dominaron la escena del rock norteamericano. Sus integrantes fueron el cantante Dave Wagner, Dick Wiegand, en guitarra, Larry Wiegand, bajo Kink Middlemist, teclados, y Harry Nehls, batería. Nehls fue tempranamente reemplazado por Denny Craswell. Mi hermano mayor, según recuerdo, compró este Crow by Crow en oferta, junto con otro de sus discos, Mosaic, en la sucursal de la calle Lavalle de la viejísima disquería Broadway de Buenos Aires que entonces era la Meca de todos los jóvenes roqueros. Debo decir que ambos discos todavía están en manos de mi hermano mayor que, entonces, podía escucharlos a diario. Como le dije una vez, mitad en broma, mitad en serio, perdí "mi gran discoteca" cuando mi hermano mayor se casó y se llevó todos sus discos (y mi tocadiscos porque me convenció de que no me serviría de nada si no tenía sus discos, esta lógica que ahora brilla por su falacia (podría haber comprado mis propios discos y conservar aun mi tocadiscos) entonces fue persuasiva para mi y me convenció y así perdí "mi discoteca y mi tocadiscos"). A mi favor puedo alegar que era un adolescente inexperto y que siempre amé mucho a mi hermano por lo que no me costó desprenderme de mi tocadiscos. Y es que el "gordo" es capaz de venderle heladeras a los esquimales y naranjas a los paraguayos, quien lo conoce sabe que puede convencer de la manera más extraña a cualquiera. Pero pasé buenos momentos con mi hermano mayor escuchando este disco y muchos otros. Y ahora Abel me devuelve aquel viejo disco perdido. Recién lo bajé y no lo escuché todavía. Lo que comento está basado en recuerdos de aquellas viejas escuchas. No sé si al escucharlo de nuevo se confirmarán aquellos viejos recuerdos o, por el contrario, no resistirá comparaciones con grandes bandas que escuché entonces y después, pero, lo que es seguro, que escucharlo de nuevo me traera a la mente una multitud de gratos recuerdos que ya comenzaron a despertarse apenas vi la carátula del disco. Una anécdota curiosa. Abel sabe (porque se lo dije una vez) que tengo ascendencia alemana por parte de mi viejo. Y mi hermano entonces compró los discos de Crow porque sus integrantes, en su mayoría, tenían apellidos alemanes, pensó (con la lógica extraña que siempre le acompañó) que siendo norteamericanos de origen alemán podrían hacer algo parecido a Steppenwolf (algunos de cuyos integrantes eran de origen germano) y, por eso, sin escucharlos, guiándose por esa corazonada y amor por lo alemán, los compró. Lo bueno que fue uno de los discos que más escuchábamos. Gracias Abel por devolverme uno de mis discos perdidos. Te dejo este modesto comentario y un abrazo
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